Curiosidades del mundo

Holi: el festival hindú de los colores

Hoy viajamos hasta la Índia, más concretamente, al norte de la Índia, para celebrar el festival hindú de los colores: el Holi.

Y es que esta festividad es conocida en todo el mundo, tanto es así que se celebra en muchos más lugares: sin ir muy lejos, en Barcelona y Madrid (aunque en diferentes fechas), se celebran El Festival Dels Colors y el HoliLife. También podemos encontrar el festival Holi en Londres y varias ciudades alemanas.

De hecho, hay hasta páginas que se dedican, exclusivamente, a la venta de los colores para el festival. como es Fiestas Holi.

En que consiste el Holi

Esta festividad está compuesto de dos leyendas hindús diferentes, por eso, también, tiene una duración de dos días.

  • El primer día encienden hogueras, así conmemoran la victoria del bien sobre el mal. Esta tradición viene celebrándose siglos, pues ya en el siglo XVII, varios comerciantes, dejaron testimonios escritos de ella.
  • El segundo, con una tradición mucho más caótica y desenfrenada, se lanzan polvos de colores brillantes y agua coloreada. Esta simboliza la felicidad por la llegada de la primavera y los sentimientos de Krishna, personificación del dios Vishnú. Los polvos, llamados Gual, siempre son en tonos positivos y alegres.
Manos con polvos de colores.
Manos con polvos de colores

No hay un lugar fijo de celebración, aunque si se celebra más en el norte de la Índia.

Otra de las tradiciones es la consumición de Bhang, que puedes encontrar en paraditas que hay en los pueblos. Esta bebida esta hecha a base de leche y cannabis.

Las leyendas del Holi: festival hindú de los colores

Prajlad, devoto de Vishnú

Cuenta la leyenda que, hace mucho tiempo, vivió un rey demoníaco, llamado Jirania Kashipú. Este era un ser muy egocéntrico, y se consideraba a él mismo como el auténtico y único dios.

Otras versiones cuentan que nació como humano y fue bendecido por Brahmá (primer ser humano y creador del universo): no podrían matarle dentro o fuera de una casa, en la tierra o en el cielo, ni por un hombre ni un animal, ni por astra (arma), ni por shastra (oración sagrada)

Su hijo Prajlad, por otra parte, era fiel devoto a Vishnú, lo cual provocaba grandes disputas con su padre. De hecho, su padre intentó matarle por esta razón varias veces. Pero le era imposible, puesto que estaba bajo la protección de Vishnú. Este hacía que el veneno se transformara en néctar, que las serpientes venenosas no atacaran a Prajald y que los elefantes, aunque le pisotearan, no le hicieran daño.

Un día, cansado de tantos intentos fallidos, planeó su asesinato junto con su hermana Hólika. Aquí discurren dos versiones, aunque las dos con el mismo final.

La primera versión cuenta que, Hólika, inmune al fuego, acogió a su sobrino en su regazo en medio de una hoguera para que ardiera. En ese momento, Vishnú le quitó la inmunidad a Hólika y protegió a Prajlad, lo que hizo que su tía ardiera hasta la muerte: venció el bien sobre el mal.

La segunda versión cuenta que, Kashipú pidió a su hermana Hólika que se sentara junto a su sobrino en una pira, mientras era protegida con un manto mágico para evitar que ella se quemara. Por su parte, Prajlad, lo aceptó de buena gana mientras rezaba a Vishnú. Una vez encendida la hoguera, Vishnú le quitó el manto a Hólika y se lo puso a Prajlad, lo que hizo que ella ardiera hasta la muerte. Vuelve a vencer el bien sobre el mal.

Por esta leyenda es que, el primer día, encienden una hoguera que representa donde murió Hólika y donde venció el bien sobre el mal.

Escultura que reprensenta Prajlad en llamas, del siglo XII.
Escultura que reprensenta Prajlad en llamas, en el templo de Keshava. Siglo XII.
Krishna, Radha y Holi: festival hindú de los colores

Esta leyenda cuenta la historia de Krishna, quién fue envenenado con leche materna por Putana, un demonio gigante. Esto provocó que su piel se volviera de color azul.

Si bien su color de piel no le importó lo más mínimo mientras creció, si lo hizo una vez conoció a Radha, una de las pastoras gopis, y de la cual se enamoró. Su piel, blanca, era tan diferente de la suya, que hizo que el dios se desalentara en su intento por conquistarla.

Tanto le afectó, que al final tuvo que intervenir su madre, quién después de ver lo mucho que sufría Krishna por su condición, y le aconsejó que le pintara a Radha la cara de color azul, de esta forma serían iguales.

A Krishna le pareció tan buena idea, que no solo la pintó de un color, si no de cuatro diferentes:

  • Rojo, símbolo del amor y la fertillidad.
  • Azul, color de Krishna.
  • Amarillo, símbolo de matrimonio en la cultura hindú.
  • Verde, símbolo de primavera y nuevos comienzos.

Por esta razón, muchos enamorados, se lanzan polvos de colores los unos a los otros, recordando lo que hicieron antaño Krishna y Radha.

Radha y Krishna con pastores y pastoras.
Radha y Krishna, pintor indio desconocido. Hacia 1700.

Esta pareja es conocida como una idea perfecta de amor, pues Krishna quería la igualdad entre los dos. De hecho, hasta han hecho una serie que se basa en sus vidas y su relación amorosa.


Cuanto nos gustaría poder celebrarlo allí presentes… Este año quizá no, pero el próximo será uno de nuestros destinos.

Deja un comentario