Antes de nada, te ponemos en situación. Olentzero es un simpático carbonero, que vive en las montañas del País Vasco y Navarra, y que, el día 25 de diciembre baja a dar a regalos a los niños. Tiene casa en Mungia y es totalmente visitable.
Historia del Olentzero
Aunque hay diferencias entre las palabras que forman al carbonero, muchos estudiosos creen que viene de onen-zaro, que significa época o tiempo de lo bueno.
En lo que sí están de acuerdo es que es uno de los últimos jentiles, seres mitológicos vascos, dotados de fuerza sobre humana. Es anterior a la cristianización de Navarra, y según la leyenda proviene del pueblo de Lesaka, frontera con Guipúzcua. Representa la llegada del solsticio de invierno, una vez pasadas las fiestas, queman un muñeco de Olentzero, como forma de representar los tiempos venideros y la quema de todo lo malo.
También fue usada su figura como un castigador, sobretodo de los niños que no se portaban bien. Se le ha llegado a describir con 365 ojos y con una boca enorme.
De hecho, en parte de Aragón y en Cataluña, se celebra el tío, un tronco que hacen «cagar» regalos. Este tronco, estaría ligado a la mitología de la que hablábamos, puesto que la tradición más antigua dice que ese tronco se quema con la llegada del invierno, y Olentzero bajaría de las montañas a calentarse con ese tronco quemado.
La leyenda del Olentzero
Cuenta la leyenda que un día, un hada que paseaba por la montaña se encontró un bebé. Este era huérfano, y para que no muriera, se lo llevó a un matrimonio que no había podido tener hijos. Estos lo criaron como propio, y creció fuerte y sano. Cuando se hizo mayor, comenzó a trabajar con su padre adoptivo en las montañas, cortando leña para convertirla en carbón.
Años más tarde, sus padres, ya ancianos, perecieron, y continó él solo el trabajo de carbonero. Se sentía muy solo sin ellos, pero no se sentía cómodo con la gente del pueblo. Fueron pasando los años, y cada vez era más huraño.
Una de las versiones cuenta que, un año, los habitantes del pueblo se descuidaron y no guardaron carbón para los meses más fríos. Cuando llegó el invierno, ninguno tenía como calentarse. Olentzero, que fue bendecido por el hada a ser un ser amable, decidió una noche bajar al pueblo y dejar en todas las casas un saco de carbón. Gracias al Olentzero pudieron pasar el invierno sin más penurias, y al año siguiente todos trabajaron duro para guardar carbón para el invierno. Olentzero, que se había sentido muy feliz al ayudar a la gente, decidió entonces bajar juguetes a los más pequeños.
Otra de las versiones cuenta que, como se sentía muy solo, bajaba al pueblo a vender carbón y leña a sus habitantes. Una de esas veces, vió a unos niños jugando y decidió hacerles regalos para dárselos el día 25 de diciembre.
Sea como fuera, Olentzero ayudó a la gente del pueblo y les hizo felices con sus regalos.
Olentzero en la actualidad
En Lesaka, la celebración comienza desde bien temprano. Por la mañana, a eso de las 11.30h comienza el concurso de Olentzero y nacimientos. Hay tres grupos, los menores de 10 años, los de 11 a 15 años y los mayores de 16 años. El ganador del concurso, saldrá en kalejira por las calles con la banda de música.
En otros lugares, cada año, excepto el pasado 2020 que fue complicado para todos, por la mañana los pequeños se encuentran con Olentzero y Mari Domingui, su mujer, y les pueden dar la carta con los regalos que les gustaría recibir. Esa misma tarde, salen en cabalgata por los pueblos.
Y vosotros, ¿qué celebráis en estas fechas?
Si necesitáis ayuda para elegir el equipaje más se adapta a vuestras necesidades, podéis contactar con nosotros mediante whatsapp o mediante el formulario que os dejamos a continuación.